Saqué a pasear a mi perra la cual es una labrador, nos cruzamos con un pastor alemán, se quedaron viendo fijamente, después de unos minutos de olfatearse, el pastor se puso a ladrar, supongo que le estaba dando un sermón y que mi perra es atea por que solo lo ignoro.
Dejara de ser una perra.
No hay comentarios:
Publicar un comentario